¡Pudimos!

Objetivo conseguido. España logra ser líder indiscutible en el deporte rey en todo el continente consiguiendo -tras 44 años de sucesivas derrotas- la Copa de Europa que tanto ha costado disputar... Atrás quedan, pues, semanas de alegría y entusiasmo entre la afición "roja" (o "rojigualda", para evitar connotaciones que no vienen al caso), de exhibicionismo patrio sin complejos por doquier. Como debe ser. Esperemos que en lo sucesivo sepamos enarbolar igualmente la bandera para defender causas comunes del conjunto de los/as españoles/as.

Siempre me congratula que España sea primera en algo. En el fútbol, como en cualquier otro deporte, siempre gusta que gane nuestro país. Pero tras todo este aletargamiento que hemos padecido en los últimos días -en gran parte, por el interés de los medios de comunicación-, ahora tocará dedicarnos a cuestiones más importantes y acuciantes. Seguiremos en la brecha, saboreando también momentos dulces como este.